A grandes rasgos enlisto mi rutina médica mensual:
- Análisis de sangre
- Visita al médico general
- Visita al especialista que lleva mi diabetes
- Visita Plus(o veo al dentista, o al ginecólogo, o al de la vista o al que tenga que checar el órgano en turno que se me esté pudriendo)
Y claro ustedes dirán “chale ya pon tu cama en el pasillo del seguro y vive ahí”, lo he pensado pero me cagan los niños y el seguro está lleno de mocosos.
Pero el pasar tanto tiempo ahí, me ha dado pie a tener muchas historias que contar, aquí una de esas:
Estaba en la cola de laboratorio esperando para mi toma de sangre, delante de mí como a 5 personas se encontraba una señora con un vaso desechable (de esos blancos térmicos que te dan cuando compras atole) y me dije “a que raro, creí que todos venían en ayunas sin tomar nada”. Ya cuando la fila avanzo y a esa señora llego a recepción escucho a la enfermera discutir con ella, pues resulta que no era atolito ni café, la señora llevaba su muestra de orina en ese vaso, así sin tapar y exigía que la recibieran y la enfermera discutiéndole que eso debe ser entregado en un frasco cerrado… huy qué mello, imaginen que se le resbalara o que sin querer alguien se tropezara con ella.
Con el tiempo iré contando pato aventuras del seguro.
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